Y el ojazos de Oslon también ha tenido ya su oportunidad. Una familia numerosa donde seguro que lo va a pasar genial.
Esther, Leyre, Miguel y Miguel Ángel tienen muy claro que un amigo no se compra, y es por eso que no dudaron en darle un hogar a este osote.
Nos encanta ver padres que inculcan estos valores de la adopción en sus hijos, son el futuro y lo estamos haciendo bien!