Hoy estos dos abueletes parten un largo viaje, y aunque estamos contentos por ellos y por la oportunidad que se les brinda en Alemania, estamos tristes a la vez.
Tristes de que ni siquiera dos perros tan mayores se libren del abandono, de que dos perros en sus últimos años de vida tengan que viajar tan lejos para tener la vida que merecen.
Es tremendo el abandono de cualquier animal, pero más si cabe el abandono de animales tan mayores, tan vulnerables…
En fin pequeños, ahora jamás sufriréis. Solo esperamos que podáis disfrutar y vivir esta nueva oportunidad el máximo tiempo posible.
Danke!!