En este caso la preciosa Pisa, a la que la pequeña Lulu y toda su familia cuidarán para siempre. Nos encantan estos finales felices en los que hay niños tan implicados. Niños que crecerán con un perro a su lado, aprendiendo a amarlos y a respetarlos, y sobre todo, niños que crecen con los valores de que UN AMIGO NO SE COMPRA.
¡Enhorabuena a esta preciosa familia y que seáis muy felices juntos!